La Presidencia de la República decidió renovar el mobiliario de la residencia de Anchorena, en el departamento de Colonia, sitio que utilizan desde hace varios años los mandatarios como lugar de descanso.

Según un llamado publicado en el sitio de Compras Estatales el pasado miércoles 1 de abril, a un mes de la asunción del presidente Luis Lacalle Pou, el Poder Ejecutivo tiene previsto comprar 18 muebles, entre los que se incluyen: una mesa de madera rectangular, seis sillas de madera, un armario de madera, dos mesas ratonas de madera, una mesa para televisor de madera, una mesa cuadrada de madera, un juego de sillones, dos mesas de luz de melamina, dos butacas de metal y plástico y una mesada con cubierta de melamina.

El llamado es para realizar una contratación directa y no incluye el monto que la Presidencia pretende gastar para la compra de los muebles.

Sudestada consultó adjudicaciones realizadas a lo largo de 2019 que figuran en la página de Compras Estatales para calcular cuál sería el gasto en el que incurriría la Presidencia para adquirir este mobiliario. Teniendo en cuenta los detalles del llamado publicado el 1 de abril, el resultado es un monto que supera los 111 mil pesos uruguayos, impuestos incluidos.

Sin embargo, como la suma no aplica los incrementos de precio por la inflación o por eventuales vaivenes del mercado, la erogación total por parte del Estado sería sensiblemente mayor. 



El llamado, que se cierra hoy 3 de abril a las 16.45 horas, dice que los oferentes deberán tener la inscripción vigente en el Registro Único de Proveedores del Estado (RUPE), que las propuestas deberán tener todos los datos de contacto de quienes realicen las ofertas y que el pago se realizará dentro de los 30 días siguientes a la entrega satisfactoria de los artículos adquiridos, mediante el Sistema Integrado de Información Financiera (SIIF).



La residencia, que hoy es lugar de descanso de los presidentes uruguayos, fue donada al Estado por el estanciero argentino Aarón de Anchorena, junto con un predio de 1369 hectáreas, que hoy funciona como parque público. El primer presidente en usarla como lugar de retiro fue Jorge Pacheco Areco y quien abrió el sitio a los visitantes fue Luis Alberto Lacalle, en 1990. 

ACTUALIZACIÓN: Pocas horas después de esta publicación, la Presidencia de la República anuló el llamado, como consta en la página web de Compras Estatales.