Cientos de apicultores provenientes de diferentes puntos del país se concentrarán mañana, martes, desde las 6 de la mañana hasta las 18 horas frente al Palacio Legislativo. Llevarán la indumentaria y los elementos de la actividad -ahumadores, mamelucos y caretas- con la finalidad de sensibilizar a las autoridades de la que consideran es la peor crisis que atraviesa el sector.

 

Los apicultores le solicitarán al gobierno subsidios ante las pérdidas económicas por no poder exportar miel y también reclaman un mayor control a los productores agrícolas por el uso y abuso de agroquímicos, en particular en las plantaciones de soja del litoral.

 

Más de 300 productores decidieron realizar esta movilización durante una asamblea realizada el pasado sábado 25 de mayo en el Club Atlético Campana de Libertad, donde analizaron la baja rentabilidad del sector, los problemas a la hora de comercializar, en especial exportar, la caída en los precios, la contaminación con glifosato y la competencia desleal que significan las “mieles” importadas de China.

 

Uno de los temas que más preocupa a los apicultores es la pérdida de la capacidad exportadora por la gran cantidad de residuos de glifosato que se constataron en las mieles uruguayas. “En agosto de 2016 un laboratorio alemán difundió un documento en el que se revelaban los niveles de glifosato en las mieles extranjeras que ingresaban a Alemania. La miel uruguaya resultó ser la más contaminada: un 70% de las mieles presentaron glifosato por encima de 50 partes por billón (0,05 mg/kg), lo que la inhabilitó para ingresar al mercado alemán. Alemania ha sido el principal comprador de mieles uruguayas en los últimos decenios (alcanzando a comprar un 90% de la miel exportada) y el que mejor ha pago”, señala una carta que la Sociedad Apícola Uruguaya (SAU) le entregó a los precandidatos de todos los partidos políticos.

 

Los apicultores llegarán al Parlamento a partir de las 6 de la mañana y sobre el mediodía serán recibidos por los integrantes de la Comisión de Ganadería, Agricultura y Pesca de la Cámara de Diputados, que también tiene a estudio el proyecto de ley de protección apícola. 

 

“El gran problema que tiene la apicultura en Latinoamérica, en los países como Uruguay, Paraguay, Brasil y Argentina, es el modelo productivo sojero y con todo el paquete de agroquímicos que tenemos”, explicó a Sudestada José Luis Maya, un productor apícola de la zona Libertad, en el departamento de San José.

 

 

Maya lamentó el anuncio, por parte de las autoridades, de la apertura de un período de consulta pública para introducir a Uruguay trigo transgénico, en una variedad resistente al glufosinato. “Nuestra lucha es porque este modelo productivo se revea por todo lo que está pasando, que ahí está incluida la abeja. Pero la lucha hay que seguirla peleándola y la forma es manifestándose a través de las diferentes movilizaciones que estamos haciendo, y después en los diferentes ámbitos parlamentarios y el Poder Ejecutivo”, dijo el apicultor.

 

A esta movilización asistirán productores independientes y los agremiados a la Sociedad Apícola Uruguaya (SAU) y desde la vecina orilla llegará Lucas Martínez, presidente de la Sociedad Argentina de Apicultores (SADA) y presidente de la Federación Internacional Latinoamericana de Apicultura (FILAPI), debido a que del otro lado del río Uruguay los apicultores también enfrentan el problema del modelo sojero. 

 

En 2016 la cantidad de apicultores en todo el país era de 3.071, según los datos oficiales del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Hoy rondan los 2.500, lo que significa que en tres años se redujo en casi 550 la cantidad de productores de miel.